Uso de cookies

Este sitio web solo utiliza cookies tcnicas propias obligatorias con la finalidad de hacer que su navegación sea segura.
Asimismo, utiliza cookies de terceros opcionales para hacer análisis estadístico de las visitas a la web y conocer su usabilidad.
Si desea más información o cambiar la configuración de su navegador, puede visitar nuestra Política de Cookies.
Pulse el botón "Rechazar cookies opcionales" o "Aceptar todas las cookies" para confirmar que ha leído y aceptado la información aquí presentada.

Planificación financiera para todos: la tecnología, la gran aliada

Octubre de 2025

Vivimos en un mundo en el que todo está conectado y acelerado, donde cada día recurrimos más a la tecnología para apoyarnos y tomar decisiones de forma informada. Sin embargo, en la planificación financiera su uso no está tan extendido como debería, ya sea por desconocimiento o simplemente por pereza. Incorporar la tecnología en este ámbito es fundamental para asegurar nuestra tranquilidad y gestionar mejor nuestro día a día.




En Afi, hace años afrontamos el desafío de crear una herramienta que facilitara la planificación financiera personal para anticiparse y organizarse para alcanzar diferentes objetivos a corto, medio y largo plazo. Comprobamos que existía una brecha entre intención y práctica, y apostamos por la tecnología como medio para cubrir esta necesidad.

Somos conscientes de que no existe una única solución válida para todos los perfiles, ya que las necesidades varían según el nivel de ingresos o la situación de cada persona. Aunque no exista una única solución, sí tenemos claro cuál es el proceso que se debe seguir.

Una primera fase donde el usuario debe tener claro un diagnóstico de la situación actual de ingresos y gastos. Después, pueda establecer una serie de objetivos a llevar a cabo, comprobando la viabilidad y visualizando diferentes escenarios. Además, incorporamos eventos clave como el cálculo de la pensión u otros hitos relevantes para que pueda proyectar la evolución de su patrimonio en el futuro.

Nuestra idea es llegar al mayor número de personas, por eso pensamos que la mejor forma es diversificar los casos de uso y ofrecer una herramienta flexible, pero siempre guiada por los mismos principios.

Dificultades comunes y cómo la tecnología puede superarlas

Actualmente, las personas se enfrentan a diferentes dificultades a la hora de realizar una planificación de sus finanzas. Una de ellas es la complejidad percibida del concepto: muchas veces se piensa que planificar es complicado, cuando en realidad puede resumirse de manera tan simple como asegurarse de no gastar más de lo que se ingresa. El riesgo está en llevarlo al extremo y hacer creer que no es importante en el día a día.

Otra dificultad es el lenguaje técnico que, a veces, se utiliza en finanzas. Esto puede hacer que las personas no consigan conectar en el proceso y sientan que no forma parte de su realidad.

Por último, la falta de visión a medio y largo plazo es otro de los problemas. Muchas personas están centradas en el ahora y no creen que sus decisiones puedan afectar a su futuro financiero.

Con estas dificultades, se hace aún más necesario el uso de la tecnología, ya que una herramienta adecuada puede dar diferentes soluciones. Una de ellas es su labor pedagógica. Muchas herramientas están pensadas para enseñar utilizando un lenguaje claro que facilita la comprensión. Además, permite dividir los procesos en diferentes pasos para simplificar conceptos que, inicialmente, parecían complejos.

La parte visual hace que el uso de la herramienta sea más atractivo y ameno a la hora de realizar una planificación, que como se ha mencionado, a veces nos resulta difícil de abordar.

Por último, gracias a la gran cantidad de datos disponibles y a los nuevos avances como la inteligencia artificial, es posible personalizar la planificación para cada usuario, adaptando el resultado a cada situación y ofreciendo una experiencia individualizada.

Principios de diseño y ejemplos reales

El uso de la tecnología para llevar una planificación adecuada debe tener diferentes principios en el diseño. Uno de los más importantes es la sencillez, que como hemos mencionado, tiene que facilitar al máximo tanto la introducción de la información como la comprensión de los resultados. Una herramienta clara ayuda a centrarse en lo importante evitando que el usuario pueda distraerse en conceptos que no le aportan valor.

En segundo lugar, la accesibilidad cobra especial relevancia hoy en día. La reciente Ley de Accesibilidad Europea (EAA) refuerza la necesidad de que cualquier contenido digital se pueda utilizar por todas las personas. Gracias a la tecnología, podemos garantizar que todos los servicios lleguen por igual, sin barreras.

Además, la herramienta debe acompañar al usuario en cada paso, explicando su situación actual y las implicaciones de sus elecciones. De este modo, cada decisión se toma de forma clara y con la información necesaria.

También es importante incorporar una perspectiva de la vida. Esto lo conseguimos introduciendo hitos personales y profesionales con el fin de proyectar una evolución de sus finanzas a lo largo de diferentes etapas de su vida.

Actualmente, en el mercado hay multitud de aplicaciones que ayudan a llevar un seguimiento de ingresos y gastos y son un claro ejemplo de la utilidad de la tecnología en el día a día. Sin embargo, la mayoría de estas aplicaciones muestran una fotografía del presente y no ofrecen la posibilidad de proyectar escenarios futuros.

Veamos dos ejemplos para entenderlo. Una persona de 30 años quiere comprarse una vivienda en 5 años, con una herramienta básica puede conocer su capacidad de ahorro, pero no puede realizar una proyección de cómo afectará esta decisión a otras metas financieras ni considerar diversas variables. De forma similar, alguien de 55 años que se acerca a la jubilación puede registrar sus movimientos actuales e incluso estimar su pensión, pero difícilmente podrá simular diferentes escenarios según su nivel de ingresos futuros y la manera de complementar sus ahorros o inversiones para vivir con tranquilidad.

Una visión clara para un futuro más seguro

Estos casos muestran la importancia de contar con una planificación completa, que vaya más allá del registro de lo que gastamos e ingresamos. La clave está en la posibilidad de simular escenarios futuros teniendo en cuenta la situación actual y siendo conscientes de nuestra capacidad de ahorro y de las decisiones que podemos tomar hoy.

Este tipo de herramientas deben convertirse en un apoyo fundamental tanto para la educación financiera como para la banca responsable. Gracias a la personalización, podemos contar con soluciones adaptadas para perfiles distintos.

Por un lado, pueden cubrir la parte de educación financiera permitiendo que cualquier persona adquiera unos conocimientos mínimos para gestionar su dinero. Por otro, también pueden servir como guía para conocer conceptos más avanzados, como decisiones en ahorro o inversión, mejorando así la calidad de vida.

De la misma forma, su aplicación en banca responsable y asesoramiento contribuye a que estos servicios sean más accesibles, transparentes y comprensibles para todos los públicos.

Para concluir, La tecnología debe ser un aliado para simplificar este proceso, acompañar a cada persona y ofrecer una visión clara de su situación, de modo que pueda tomar decisiones informadas y conseguir un futuro más seguro y sostenible.


Manuel Pozo, consultor de Afi