Otro abril hist贸rico
Mayo de 2025Abril de 2020 pas贸 a la historia por el "Gran Confinamiento". Las autoridades pol铆ticas de la mayor铆a de los pa铆ses optaron por priorizar la salud y, para frenar la expansi贸n exponencial de la COVID-19, impusieron la reclusi贸n de los ciudadanos en sus hogares. La paralizaci贸n de la econom铆a fue hist贸rica y, en consecuencia, asistimos a eventos in茅ditos en los mercados financieros. Entre ellos destaca la ca铆da del precio del barril de petr贸leo, que el d铆a 20 fue negativo (en la modalidad West Texas, alcanzando -37 USD/barril). Esta situaci贸n se explic贸 por el hundimiento de la demanda que llev贸 a los poseedores de crudo a preferir pagar para vender los barriles antes que tener que hacer frente al coste de almacenaje y transporte.

Abril de 2025 pasa a la historia por el "D铆a de la Liberaci贸n". El d铆a 2 las autoridades pol铆ticas de un solo pa铆s, en este caso EE. UU., anunciaron la imposici贸n de elevados aranceles a la importaci贸n de productos de la pr谩ctica totalidad de or铆genes. Se optaba as铆 por una medida que ten铆a como objetivo "volver a hacer grande a EE. UU.". Es decir, con la mayor subida de impuestos de una sola vez de la historia, el equipo econ贸mico del presidente Trump pretend铆a desmontar la globalizaci贸n de bienes vigente en las 煤ltimas d茅cadas, acelerada desde la incorporaci贸n de China a la Organizaci贸n Mundial del Comercio (OMC) en diciembre de 2001. El plan parec铆a ser volver a industrializar EE. UU. para producir bienes de menor valor a帽adido y con peores salarios, desbancando as铆 a Vietnam, China o M茅xico de su poder铆o manufacturero en este tipo de productos.

La reacci贸n de los mercados financieros, como sucedi贸 hace cinco a帽os, arroja elementos de an谩lisis interesantes. Y no solo nos referimos a la ca铆da de las cotizaciones burs谩tiles, un hecho m谩s o menos "entendido" por todos, sino a lo observado en el mercado de bonos del Tesoro de EE. UU. y en el USD. La p茅rdida de valor de sendos activos (reflejada en un aumento de los tipos de inter茅s en el primer caso y en la depreciaci贸n en el segundo) fueron el reflejo del cambio de perspectiva de los inversores del resto del mundo.

Si algo se ha puesto de manifiesto en los 煤ltimos a帽os es que EE. UU. es la econom铆a desarrollada m谩s din谩mica del mundo. Su crecimiento diferencial del PIB respecto a la zona euro o Jap贸n se ha apalancado en una elevada ventaja competitiva en 谩reas de elevado valor a帽adido como la tecnolog铆a, la biotecnolog铆a, la investigaci贸n cient铆fica o los servicios financieros.

Este hecho ha ejercido de im谩n de los capitales internacionales, que se han dirigido a la econom铆a de EE. UU., permiti茅ndola contar con "combustible" para financiar su expansi贸n diferencial. Pero es que ha habido otro motivo adicional para dirigir los flujos hacia los mercados de capitales de ese pa铆s: la percepci贸n de econom铆a predecible y segura. Nadie dudaba de categorizar a EE. UU., a su mercado de acciones y de bonos, as铆 como a su moneda como los "activos refugio". Ello es lo que ha permitido financiar un persistente d茅ficit en la balanza por cuenta corriente equivalente al 2,0% - 4,0% del PIB anual sin ninguna fricci贸n en las variables financieras.

Pero todo cambi贸 con la decisi贸n de Trump de principios de abril. Y no solo con la decisi贸n en s铆 misma, sino con las formas. La beligerancia y agresividad del anuncio fue considerado como ofensivo por parte de las econom铆as afectadas, que eran, y esto es muy importante, importantes tenedores de los activos financieros estadounidenses. Bien sea como represalia, bien como evidencia de que EE. UU. ya no era la econom铆a predecible y segura que se presupon铆a, los inversores internacionales optaron por vender no solo las acciones estadounidenses, sino tambi茅n los bonos emitidos por el Tesoro de aquel pa铆s, presionando al USD. Y, sobre todo, habl谩ndose por primera vez de la p茅rdida de atractivo de EE. UU. y del rol de activo refugio.
El tiempo dir谩 c贸mo evoluciona la pol铆tica econ贸mica de Trump, pero la imposici贸n de aranceles del 2 de abril ha evidenciado vulnerabilidades de EE. UU., entre ellas, el contar con d茅ficit de la balanza por cuenta corriente, lo que hace a esta econom铆a dependiente de los flujos de inversi贸n internacional. Estos no han tenido en 煤ltimos a帽os ning煤n inconveniente en dirigirse hacia aquel pa铆s ante la constataci贸n de su crecimiento diferencial y, sobre todo, su elevada seguridad, predictibilidad y estabilidad jur铆dica. Pero si las tres caracter铆sticas cambian por una decisi贸n de las autoridades del pa铆s, est谩 claro que se produce una reacci贸n en las cotizaciones de los activos financieros. Los mercados financieros aportan informaci贸n relevante y en ocasiones pueden condicionar la actuaci贸n de los gobiernos (como ya pas贸 en la zona euro con las primas por riesgo soberanas). Es curioso c贸mo quienes en otros momentos del tiempo han criticado la "tiran铆a de los mercados" ahora valoren de forma positiva que la evoluci贸n del S&P 500, de la TIR del TNote o la depreciaci贸n del USD hayan llevado a Trump y a su equipo a cambiar de "plan". EE. UU. ha sido uno de los grandes beneficiados de la globalizaci贸n de los 煤ltimos a帽os tanto en la producci贸n y venta de manufacturas y servicios, como en las finanzas. Dar marcha atr谩s en el proceso de forma desordenada, unilateral y preponte ser铆a un error econ贸mico hist贸rico.