Integraciones bancarias: equilibrio entre eficiencia y competencia
La exigua rentabilidad bancaria, en un contexto de tipos cero o negativos, y sin crecimiento de negocio, es el principal problema de la banca española y europea desde hace más de un lustro, y sin duda el primer factor explicativo de su reducida valoración en el mercado. Con la crisis sobrevenida provocada por la COVID-19, esa rentabilidad está aún más en entredicho, y así lo ha reflejado el mercado bursátil, con una penalización a la banca mucho más intensa que al resto de sectores cotizados.